Consejos para reformar una vivienda antes de venderla
Consejos para reformar una casa antes de venderla. Te damos los mejores consejos para reformar una vivienda antes de venderla.
El mercado inmobiliario es uno de los sectores con mayor incertidumbre. Si estamos interesados en alquilar o vender, el proceso desde que ponemos el cartel de venta hasta que se materializa con el cierre de esta transacción se puede demorar durante meses, todo depende de unos factores.
Visitas, mantenimiento de una vivienda vacía y esperas es algo característico de estas situaciones que, si nos urge mucho su venta, puede empujarnos a aceptar una rebaja de su precio con tal de cerrarla cuanto antes. Ante este tipo de problemáticas, existen algunas opciones que pueden agilizar todo el proceso, como contar con servicios externos que nos pueden ayudar a buscar a futuros propietarios o intentar promocionar nuestra vivienda. Sin embargo, son opciones que no nos garantizan un éxito en nuestra venta y nos suponen un coste que luego no impactan de forma definitiva en la vivienda.
No obstante, una de las opciones más interesantes si nos encontramos en una situación de este tipo se trata de reformar para revalorizar ¿Sabías que reformando nuestro hogar puede revalorizarse en un 30% más respecto al valor actual? Pero no solo se trata de obtener una mayor cantidad económica por su venta, sino que el proceso se agilizará debido a que potenciaremos, mediante nuestra reforma, aquellos atributos que más buscan los usuarios – luz natural, amplitud, baños renovados y una cocina a la altura. El objetivo de la reforma es crear un hogar acogedor donde los futuros inquilinos puedan imaginar su nueva vida en él.
Para saber si nuestra vivienda se verá revalorizada es interesante analizar la situación de los pisos de la zona. De esta manera compararemos las viviendas que no están reformadas de las que sí que lo están para ver la diferencia en su valor y poder embarcarnos en esta aventura con todo tipo de garantías. También es de valorar la zona en la que se encuentra el inmueble, porque no es lo mismo reformar en un barrio de moda que en aquellos menos atractivos.
Reformas existen de muchos tipos. No es lo mismo reformar nuestro hogar familiar -donde impregnamos la vivienda de nuestra personalidad por completo- que reformar una vivienda que queremos vender o alquilar. El objetivo, en este caso, es actualizar los espacios que nos permita crear un lienzo en blanco para que sean los futuros inquilinos quienes dejen su huella. Así pues, nos interesa apostar por materiales y colores populares y en tendencia, que cuenten con una aceptación generalizada. Suelo de parquet y paredes en colores claros son algunos ejemplos siempre populares.
Si nuestra vivienda está algo desactualizada y su futuro valor se puede ver incrementado sustancialmente, una reforma integral es la mejor opción – baños, cocina, salón, paredes, ventanas y suelo son algunas de las actuaciones que podremos ejecutar. Obteniendo así una vivienda sostenible, con un consumo mensual de energía menor y equipada con materiales de altas prestaciones. Sin duda, los futuros propietarios estrenarán su hogar por todo lo alto y nuestro poder de negociación será mayor.
Sin embargo, si nuestra vivienda es relativamente nueva o su valor no se va a ver incrementado con tanta magnitud, las reformas parciales son tu solución – renovar el suelo, actualizar un baño anticuado, mejorar la cocina, pintar las paredes, averías, cambiar las ventanas, entre muchas más opciones. Actualizaciones que se adaptan a las necesidades de la vivienda y de los futuros propietarios, mejorando sustancialmente las condiciones de nuestra propiedad para que sea mucho más atractiva a ojos de unos potenciales compradores.
Una vivienda reformada puede aumentar su alquiler un 30% y su valor de venta en un 20%
El proceso de venta o alquiler de una vivienda a veces no es todo lo rápido y ágil que nos gustaría. En ocasiones pasamos meses y meses con la vivienda vacía, o dedicando parte de nuestro tiempo a gestiones propias de la venta o el alquiler, o incluso mostrando nosotros mismos la casa, si no contamos con alguien externo que se encargue de eso.
Especialmente en el contexto actual, las operaciones de venta y alquiler de viviendas pueden demorarse más en el tiempo, y para intentar agilizar un final que parece no llegar nunca, decidimos rebajar el precio inicial, con el objetivo de encontrar un cierre más rápido.
Una reforma se plantea como la solución a lo que están demandando quienes están en busca activa de vivienda actualmente, especialmente quienes quieren alquilar una, ya que estos inquilinos no se plantean realizar una reforma una vez hayan entrado a vivir en la casa. Para aquellos que buscan comprarla, nos estaremos diferenciando del resto, ofreciendo la comodidad de una vivienda preparada para disfrutar desde un principio y sin la necesidad de reformarla.
Juan Rosado
CEO